Por los motivos ya confesados, Cráneos Privilegiados o crítica de la razón perralleira, el nuevo espectáculo de Mofa y Befa, se proponen como un regreso a los orígenes, a la búsqueda de la raíz y del impulso cómico que animó la carrera de estas dos luminarias del xitanismo ilustrado. Y en el principio, claro, era la mampara. Por primera vez en un espectáculo de Mofa y Befa, la mampara será abatido por la transparencia, presentado en su esencia más abstracta como simple marco conceptual: la frontera entre el mundo de las apariencias, el espacio donde la acción cómica tiene lugar, y el mundo de la verdad, el espacio invisible donde los actores se maquillan y perfilan aquello a lo que Diderot llamó la paradoja del comediante: su cínica pretensión de conmover al público con un control absoluto de las propias emociones.