FESTIVAL SINGULAR
En el día del "Festival de homenaje al circo", una función benéfica en la que van pasando números circenses en un teatro, un payaso espera su turno. Van a hacer que sala al escemario por una trampilla...
En un minuto Charlie Rivel nos hacía llorar de risa. Y Tortell Poltrona los calientan el corazón. La gente entra con toda su mierda y con todo su mundo hijo de puta. Y en un minuto se lo arrancas y lo tiras lejos, fuera de aquí. Luego salen a la calle y se tropiezan con él y se lo vuelven a meter en el bolsillo.
Se meten en el bolsillo su mundo hijo de puta como si fueran a llaves de su casa. Pero se les quedó dentro la luceciña de la sonrisa. Y cuando menos lo esperaban, en medio de su mundo hijo de puta, se les mete en el oído la voz de Zampabolos: "Un puentecito, un puentecito", o la voz de Charlie Rivel: "Uhhhhhh", o la voz de Pepe Viyuela: "Jodeerr"
Ese minuto les puede salvar la vida... el minuto del payaso.